Cargar el coche eléctrico mientras se trabaja no solo es cómodo, sino que está transformando la movilidad de los empleados. Cada vez más empresas instalan cargadores en los parkings de sus oficinas, facilitando el día a día de su plantilla y reforzando su compromiso con la sostenibilidad. Dotar de puntos de recarga para vehículos eléctricos a tu empresa supone una mejora en los servicios y es una inversión que aporta valor real al negocio. Si lideras una compañía y estás valorando la puesta en marcha de cargadores eléctricos, es el momento de dar el paso. Descubre por qué equipar tu empresa con esta tecnología puede marcar la diferencia.
Cargar el coche en el trabajo: ventajas para toda la empresa
Instalar puntos de recarga para vehículos eléctricos en el aparcamiento de tu negocio es una decisión estratégica con impacto directo en la compañía que, además, incrementa la comodidad de los empleados. Empresas de todos los sectores están incorporando esta infraestructura para mejorar su competitividad, atraer talento, optimizar costes y adelantarse a las normativas de movilidad sostenible. Los puntos de carga para VE generan efectos positivos en toda la organización: desde la optimización de recursos hasta el refuerzo de la imagen de marca. Si tu firma está valorando esta inversión, aquí tienes las principales ventajas que puede aportar.
1. Atracción de recursos humanos y fidelización del talento
El acceso a la carga del coche eléctrico en el trabajo es un beneficio muy valorado por los empleados que ya tienen un VE o que están considerando adquirir uno. Ofrecer esta facilidad mejora la satisfacción laboral, refuerza el employer branding y ayuda a retener a los profesionales en un mercado cada vez más competitivo. En lugar de hacer paradas específicas para recargar, los trabajadores pueden llegar a la oficina, conectar su vehículo y asegurarse de que al final de la jornada estará listo para el trayecto de vuelta a casa. Las empresas que proporcionan beneficios adicionales a sus trabajadores, como la recarga de coches eléctricos, generan un entorno laboral más atractivo y motivador.
2. Mejor posicionamiento y reputación corporativa
Las empresas que apuestan por la sostenibilidad generan una mejor percepción de marca. Instalar cargadores eléctricos en tu parking demuestra un compromiso real con la movilidad sostenible, alineando a tu compañía con las políticas medioambientales y atrayendo tanto a clientes como a inversores que valoran la responsabilidad ecológica. Los centros de trabajo con cargadores contribuyen a ampliar la red de infraestructuras de recarga y a fomentar el uso del coche eléctrico entre aquellos empleados que todavía dudan en dar el paso. Las empresas que apuestan por abordar la transición hacia una flota eléctrica también perciben cómo su reputación corporativa mejora. Se trata de una manera de cumplir con los objetivos de responsabilidad social corporativa (RSC) y cultivar una imagen positiva entre clientes y socios.
3. Incentivos fiscales y reducción de costes en la empresa
En muchos países, la instalación de puntos de carga en empresas cuenta con subvenciones y deducciones fiscales que reducen significativamente la inversión inicial al apostar por la electromovilidad. A estas ayudas se suman los beneficios de implantar flotas de vehículos eléctricos corporativos. Disponer de puntos de carga en la oficina permite a los líderes y gestores de empresas optimizar el consumo energético, reducir tiempos de inactividad y controlar los costes operativos. Además, en combinación con sistemas de gestión inteligente de la carga, puedes evitar picos de demanda y minimizar el impacto en la factura eléctrica.
4. Refuerzo del compromiso ambiental al reducir las emisiones
Cada coche eléctrico que se carga en el trabajo es un paso más hacia un modelo de movilidad sostenible. Al reducir el uso de gasolina o diésel, disminuyen las emisiones contaminantes y la empresa refuerza su política de protección del medioambiente. Cada vez más negocios como hoteles, restaurantes o centros deportivos buscan reducir su impacto ambiental y mejorar su imagen apostando por la movilidad eléctrica. Ofrecer cargadores para empleados confirma este compromiso con el planeta, rebajando las emisiones de CO₂ y promoviendo hábitos de transporte responsables.
5. Cumplimiento normativo y anticipación a futuras regulaciones
La legislación en materia de movilidad sostenible está evolucionando rápidamente. Instalar cargadores eléctricos en tu empresa no solo te ayuda a cumplir con las normativas actuales como el Real Decreto Ley 29/2021, sino que también te prepara para futuras exigencias legales, evitando sanciones y asegurando una transición progresiva hacia un modelo energético más eficiente.
Instala puntos de recarga en la sede de tu empresa con Eranovum
Contar con puntos de recarga mejora la movilidad de los trabajadores, fortalece el compromiso ambiental de las compañías y contribuye a construir una red de transporte más limpia y accesible. Instalar puntos de recarga en la sede de tu negocio sin coste es posible con Eranovum.
Si quieres disponer de cargadores en tu empresa, rellena el formulario con tus datos. Nuestro equipo contactará contigo para valorar tu proyecto.